El Evangelio de Judas

“Los gilionim (evangelios) y los libros de los minim (herejes) no deben ser salvados del fuego; R’ Ishmael dice: “ellos vierten enemistad, odio y lucha entre Israel y su Padre celestial”.


Introducción.


Mientras buscaba una explicación a los descubrimientos de los textos de los rollos del Mar Muerto, el texto anti-misionero de Itzjaq Ibn Saprut (el Evangelio de Mateo Hebreo) y entre otras fuentes antiguas con el texto encontrado por S.M Stern y el Pr. Shlomo Pines Z”L, no solo empecé a dudar sobre la visión sinóptica del Yesh”u presentado por la Iglesia Católica y Protestante segundamente por los misioneros mesiánicos. Por lo que descubrí en la historia del canon de los libros del Brit Jadashah (El “nuevo testamento”) no era la típica imagen arquetípica sobre la recopilación de estos textos que el judaísmo mesiánico y nazareno considera como sagrados, en realidad la primitiva comunidad cristiana (rishone notzrim o natzratim) se componía de todo un espectro de grupos diferentes. En líneas generales, estos grupos pueden dividirse en dos escuelas distintas, Por un lado estaban los “literalistas”, a los que llamaremos así porque los define el hecho de interpretar la historia de Yesh”u como la crónica literal de acontecimientos históricos. Fue esta escuela del cristianismo la que adoptó el imperio romano en el siglo IV de la Era Vulgar y la que devino el catolicismo romano y todas sus variantes. Por otro lado, sin embargo, había también cristianos radicalmente distintos: los llamados “gnósticos”.



a) Nag Hammadi: La Academia del paganismo cristiano de la antigüedad y su encuentro con el Judaísmo Mesiánico.


Más adelante la Iglesia Oriental persiguió a la mayoría cristiana de los primeros siglos hasta que los desaparecieron. La persecución fue tal concienzuda que hasta hace poco lo único que sabíamos de ellos era lo que decían los escritos de sus detractores. Ser conserva sólo un puñado de textos gnósticos originales, ninguno de los cuales se publico antes del siglo XIX. No obstante, esta situación cambio de forma espectacular debido a un notable descubrimiento que se hizo en 1945. Un campesino árabe encontró una colección de evangelios gnósticos escondida en una cueva cerca de Nag Hammadi, en Egipto-. Gracias a ello, los estudiosos pudieron examinar muchos textos que circulaban entre los primitivos cristianos pero que fueron excluidos deliberadamente del canon del actual Nuevo Testamento: evangelios atribuidos a Tomás y Felipe, textos que dejaban constancia de los Hechos de Pedro y los Doce Apóstoles, Apocalipsis atribuidos a Pablo y Santiago, etc.
Nos pareció extraordinario que se descubriera toda una biblioteca de documentos cristianos primitivos que contenían las supuestas enseñanzas de Yesh”u y sus talmidim (discípulos) y que, pese a ello, tan pocos cristianos, judíos mesiánicos, natzratim de la época moderna estuviesen siquiera enterados de su existencia.

· ¿Por qué no se apresuraron todos los judíos mesiánicos y natzratim a leer estas palabras de su Rabino Yehoshua de Natzrat (Jesús de Nazaret) que acababan de descubrirse en la década de los 40as, o por lo menos lo hubieran hecho en la década de los 80as cuando surge dicho movimiento?
· ¿Por qué los “rabinos” mesiánicos todavía no pueden leer mas que el reducido número de evangelios (besorot) que se selecciono por parte de la Iglesia Occidental para incluirlos en el Brit Jadashah –Nuevo Testamento?


Al parecer, aunque han pasado dos mil años desde que los primitivos cristianos (llamémosle mesiánicos o netzarim espirituales) fueron exterminados, y aunque durante este largo periodo la Iglesia Romana se ha dividido y han aparecido el Protestantismo y otros miles de grupos, existe aún la opinión de que los primeros mesiánicos espirituales (gnósticos) no son una voz legitima del los netzarim (mesianismo, o cristianismo).


b) Los mesianicos al igual que los Gnósticos aseguran ser el movimiento original de Yesh”u (Yehoshua de Natzrat- Jesús de Nazaret).

Al estudiar los besorot natzratim-espirituales (evangelios gnósticos) descubrimos una forma de natzarut muy ajena a la religión con la que la humanidad esta familiarizada. En Nag Hammadi se encontraron tratados esotéricos (los mesiánicos de D.A Hayyim dirían que son “cabalistas”) que llevan títulos como por ejemplo, Hipótasis de los arcontes y Los pensamientos de Norea. Se tenía la sensación de esta en un episodio de Star Trek y en cierto sentido así lo era. Los gnósticos eran en verdad “psiconautas” audaces que exploraban las últimas fronteras del espacio interior en busca de los orígenes y el sentido de la vida. Los gnósticos creían ser la tradición cristiana autentica –al igual que los natzratim que conocemos en la actualidad opinaban que los obispos ortodoxos eran una iglecia de imitacion, y al igual que los mesianicos afirman conocer los misterios originales de las palabras de Yesh”u que los literalistas (católicos, protestantes y sus sectas) no poseen. Aunque a los gnósticos, como a los natzratim se les recordaba como herejes, los gnósticos como los natzratim creen ser los cristianos auténticos.



c) El canon del Judaísmo Mesiánico, netzarim y natzratim.
Al igual que el canon presentado por el pastor cubano Daniel Hernández (D.A Hayyim o Dan Ben-Avrahan), ó el pastor cubano Ariel Frías (Avdiel benOved) presentan un “canon” el cual es un refrito del mismo “nuevo testamento” pero bajo diversos nombres como “Código Real” y “Ket”er” cuyos libros solo están acomodados de diferente forma pero en esencia contienen los mismos libros de la Iglesia Católica Apostólica Romana, en el caso de los natzratim de Ariel Frías tratan de ser los restauradores de su viejo movimiento herético (visto desde el judaísmo, ó desde el catolicismo) utilizando documentos antiguos como la traducción del evangelio de Mateo por Shem-Tov Itzjaq Ibn Saprut, y las peshitas (evangelios en arameo) tal fenómeno se acerca más al catolicismo practicado por la Iglesia Maronita, así como la utilización del libro Didaje (Doctrina de los Apóstoles); mientras que loe netzarim del Sr. Daniel Hernández, Ishmael Mizraji Portillo, y otros lideres mesiánicos de forma mediocre tratan de mantener la línea de los hebraístas-cristianos protestantes de John Toland, Frantz Delishcz, etc, tales acciones los acerca más al cristianismo protestante. Desde una perspectiva sincera sobre la utilización del canon cristiano correspondiente a la Iglesia Occidental, el “judaísmo” mesiánico solo han sabido reciclar las antiguas creencias, practicas y libros de la Iglesia de Occidente no presentando nada innovador para los mismos cristianos que devotan esta secuencia de cultos cristianos.

d) La propuesta tacita de los Natzratim sobre su Nuevo Testamento.
Cuando el líder de los natzratim dice:


“Cuando hablamos de Kitve Talmidim Rishonim [N.T] nos referimos a todos los escritos que hoy tenemos de los Primeros Discípulos de Yehoshúa [Jesús], donde encontramos recopilados no solo las palabras de Iehoshúa, sino que también las de sus Shlujim (Emisarios) y Manhiguim (líderes)…”


En este caso seguramente al decir: “todos los escritos que hoy tenemos de los Primeros Discípulos de Yehoshúa [Jesús]” seguramente él incluiría la siguiente lista de los Kitve Talmidim Rishonim Avudim (Escritos de los Primeros Discípulos perdidos):

I. Allogenes (El Extranjero)
II. Apócrifo de la Epístola de Pilato a Tiberio.
III. Apócrifo de la Epístola de Tiberio a Pilato.
IV. Apócrifo del Evangelio de María Magdalena.
V. Apócrifo del Evangelio de Bernabe.
VI. Apócrifo del Evangelio de Nicodemo.
VII. Apócrifo de Juan I.
VIII. Apócrifo de Juan II.
IX. Apócrifo de Juan III.
X. Apócrifo del Apocalipsis de Pedro.
a. Redacción copta.
XI. Carta a Aristeo.
XII. Carta de Pilato al Cesar.
XIII. Carta de Letulio a Octavio.
XIV. Carta de Policarpo.
XV. Carta de Pedro a Felipe.
XVI. El Canon de Muratai.
XVII. Didaje (Doctrina de los Doce Apóstoles).
XVIII. Dialogo del Salvador.
XIX. El libro secreto de Juan.
XX. El Libro del Gan Logos.
XXI. El Libro de Jeú.
XXII. El Libro de Tomás el Luchador.
XXIII. El Tratado de la Resurrección.
XXIV. El Tratado Tripartito.
XXV. El Primer Apocalipsis de Santiago.
XXVI. El Pastor de Hermas.
XXVII. El Evangelio de Valentín.
XXVIII. El Evangelio de la Natividad de María.
XXIX. El Evangelio de Pedro.
XXX. El Evangelio de Felipe.
XXXI. El Evangelio de Judas.
XXXII. El Evangelio secreto de Marcos.
XXXIII. El Evangelio de los Egipcios.
XXXIV. El Evangelio de los Nazarenos.
XXXV. El Evangelio de los Ebionitas
XXXVI. El Evangelio del Salvador.
XXXVII. El Evangelio de la Verdad.
XXXVIII. El Evangelio de Ammonio.
XXXIX. El Evangelio de Santiago.
XL. El Evangelio de Bartolome.
XLI. El Evangelio de Matias.
XLII. El Evangelio de Santiago el Menor.
XLIII. El Evangelio de Andrés.
XLIV. El Evangelio de Cerino.
XLV. El Evangelio de Basílides.
XLVI. El Evangelio de Marción.
XLVII. El Evangelio de Apeles.
XLVIII. El Evangelio de Bardesanes.
XLIX. El Evangelio de Mani.
L. El Evangelio de la Infancia según Tomás.
LI. El Evangelio de los Hebreos.
LII. El Pseudo Evangelio de Mateo.
LIII. El Evangelio de Tomas.
a. Apócrifo redacción griega del Evangelio de Tomas.
LIV. Epístola de Clemente a los Romanos.
LV. Epístolas de Ignacio de Antioquia.
LVI. Epístola de Bernabe.
LVII. Epístola de Clemente de Roma a los Corintios.
LVIII. Epístola de la Iglesia de Esmina a la de Filomeno.
LIX. Hipótasis de los Arcontes.
LX. Homilías Clementinas.
LXI. Homilías Pseudo-Clementinas.
LXII. Las Odas de Salomón.
LXIII. La Sabiduría de Salomon.
LXIV. La Carta de los Apóstoles.
LXV. La Pistis Sophia.
LXVI. Los Hechos de Juan.
LXVII. Los Hechos de Pilatos.
LXVIII. Los Pensamientos de Norea.
LXIX. La Carta de Pedro a Felipe.
LXX. La Exegesis del Alma.
LXXI. La Historia de José el Carpintero.
LXXII. La Primera Carta de Clemente.
LXXIII. La Segunda Carta de Clemente.
LXXIV. Las tres estelas de Set.
LXXV. Pensamiento trimorfo.


Como podemos darnos cuenta, el numero de los libros que no fueron incluidos en el llamado “Nuevo estamento o “Brit Jadasha” (este nombre ya me es hilarante), nos podemos dar cuenta cal era la tendencia antes de la homogenización hecha por Constantino en el Concilio de Nicea, era el cristianismo gnóstico con sus 72 libros a favor de ellos, mientras que la Iglesia de Constantino solo contaba con 27 miserables libros los cuales conforman el canon que utilizan tanto cristianos, mesiánicos y natzratim.


Esto no ha de ser tomado con poca importancia, pues también indica que el 72 % de los cristianos primitivos eran de afinidad gnóstica, mientras que una minoría ridícula (con un 28 %) fue la que impuso su cristianismo (natzrut) espurio sobre la mayoría contundente la cual fue aplastada por el poder imperial de Constantino.

e) El Evangelio de Judas: Más antiguo que el Evangelio de Mateo-Hebreo de Shem-Tov.
¿Por qué en este análisis hablo sobre el Evangelio de Judas? Es sencillo pues este evangelio es uno de los más antiguos conservados (incluso es más antiguo que el Evangelio de Mateo Hebreo de Shem-Tov) Este texto se estima que el texto griego original del evangelio, del que hay una traducción al copto, fue escrito por un grupo de los primeros gnósticos cristianos en algún momento entre la escritura de los Evangelios según Mateo, Marcos, Lucas y Juan, incluidos en el Nuevo Testamento, en el 180 D.C.

Este evangelio contiene palabras de origen pseudo-hebreo como Rabí, Yasuo (Jesús), Barbelo, Adamas, Yaldabaot, Saklas, Nebro, Harmathoth, Yobel, Adonaios, Galilia, etc.
ii. Yesh”u no es hijo de Yosef el Carpintero, es engendrado por María, y el mismo Yesh”u descendió a la tierra como ‘logos’ (similar que el que presenta Juan) con el fin de revelar y salvar a los hombres. Este logos se encarna por segunda ocasión en la personalidad de Yesh”u, mientras que en la primera venida fue bajo la forma de Adamas o Adam HaRishón quien come la manzana y se hace igual al dios de los judíos.
iii. En el Evangelio de Judas aunque no hace mención a la trinidad, pero si lo hace hacia una cuatrinidad, a tres primeras entidades divinas emanadas de Barbeló. Es esta una palabra hebrea compuesta, be-arba’-el la cual se convierte en una acrónimo denominado: B”arb”el y con las letras coptas es Barbelo, que significa “Dios en cuatro”, bajo la concepción gnóstica predominante de los 72 libros el dios de los gnósticos estaba conformado no por una dualidad (como se tenia en el neo-platonismo, y en el gnosticismo embrionario), sino que era la concepción de una cuatrinidad conformada por el dios supremo, el demiurgo (el padre), el hijo, y el intelecto (espíritu santo).
iv. Así como en el capitulo 3 el mismo Yesh”u se identifica como un foco de deidad diciendo:
“Yeshu les dijo “porque están preocupados? Ciertamente les digo, todos quienes se paran ante un altar de piedra me invocan” Evangelio de Judas, Capitulo 2.
v. En el antiguo Evangelio de Judas, Yeshu se refiere a HaSh-m bajo el nombre: Yaldabaot; y Yesh”u considera que es un dios inferior (Demiurgo) como lo haría el mismo Pablo en su 2 Carta a los Corintios 4:4, mientras que el Yesh”u de este evangelio va más allá que el mismo Pablo, pues llama a Yaldabaot bajo el nombre despectivo de “Saklas”, que significa “necio”. Yesh”u cree que al final de los tiempos, Yaldabaot será destruido.
vi. Yesh”u en el Evangelio de Judas se mofa de los cohanim (sacerdotes de Jerusalem) y del pueblo de Israel, a quien los considera como asesinos, homosexuales, quienes están sujetos al designio de los astros (mazalot) quienes son los ángeles malvados de Yaldabaot.
vii. Yesh”u considera a Yehudah IshKeriot como el discípulo más superior que todos los demás shlujim (apóstoles) y es a el al que le revela todos los secretos del reino de su dios B”arb”el.
viii. Yehudah IshKeriot traiciona a Yesh”u por expresa indicación de éste para cumple la voluntad del Revelador (el dios de Yesh”u).
ix. Yesh”u levanta una profecía hacia Yehudah IshKeriot en la cual será alabado por las subsiguientes generaciones de cristianos y conocedores mientras que los hombres corrientes e ignorantes lo despreciarán como el traidor.
x. Yehudah IshKeriot es denominado como el “salvador secreto” de la humanidad.
Si bien, el judaísmo mesiánico (que nada tiene de judaísmo) podría restaurar uno de los 72 libros, como por ejemplo el Evangelio de Judas e incluso podrían llamarlo Besorat Yehudah Ish-Keriot u otro de los libros que no fueron incluidos en su pusilánime Nuevo Testamento cuya versión fue producto de la política imperial de Constantino, o bien podrían arrojar al bote de basura su librito y encenderle fuego y enfocarse a estudiar solo Torah, Halajah y olvidarse de toda la jaqueca de los malditos libros del nuevo testamento sus derivados y sus pervertidas creencias idolatras.

Conclusión.


El movimiento judeo-cristiano de hoy en día, llámese judíos mesiánicos, jews for-jesus, nazarenos, natzratim y otros grupos a fin dicen ser los restauradores del antiguo movimiento “judío” de Jesús (Yesh”u),sin embargo si consideramos que el antiguo movimiento cristiano de los siglos I al III esta conformado por un 71 % de gnósticos cuyas creencias se vinculaban primordialmente a las creencias paganas gnósticas, en ese caso lo más próximo que estos modernos misioneros tendrían que renovar sería el Avodat Ba’al (Servicio a Ba’al- עבודת בעל) con un sincretismo greco-copto pues durante estos siglos, diferentes grupos de cristianos apelaron a una variedad de escritos para autenticar sus prácticas y creencias particulares tal como lo tratan de hacer los misioneros cristianos por medio de sus tácticas para convertir al pueblo judío al paganismo cristiano.


Es momento de regresar al origen a la fuente principal, a HaShem, Su Torah en estos días de Teshuva, es tiempo de no voltear atrás a ese pilar de sal denominado “judaísmo” mesiánico o cristianismo.

El Templo de Jerusalem